martes, 8 de enero de 2008

La realidad del crecimiento mediocre

Por: Mauricio Ríos García

Este próximo martes 22 de enero, es el día en que se cumplen 2 años del ingreso de Morales a Palacio Quemado y siguen presentándose contrasentidos. En este tiempo, el crecimiento económico ha sido mediocre, tanto así, que ha sufrido una desaceleración, a pesar de que vivimos una época más bien favorable en el marco internacional, luego de algo más de 40 años.

Si el contexto externo fue tan favorable para el carácter primario exportador que tienen los países latinoamericanos, ¿por qué el crecimiento de Bolivia fue de apenas un 4.1% en 2006 y de un peor 3.8% en 2007, cuando países como nuestro vecino Perú, crecen a un ritmo de 8.3%?

Meses después de que Morales asumiera el mandato, el gobierno presentó el Plan Nacional de Desarrollo (PND), que proyectaba un crecimiento promedio del 6.3%, entre el 2006 que empezaba en el 4.1%, hasta el 2011 que reportaría un 7.6%. Sin embargo, el Ministro Loza acaba de publicar un ensayo en La Paz, este pasado 8 de enero, que califica la gestión del año pasado como positiva, con una serie de números que solamente distraen la atención del verdadero problema de fondo, que es la mediocridad por incumplimiento de objetivos.

El PND expresa que para el caso de la inversión global, esta alcanzaría el 14.5% del PIB en 2006 y que superaría el 18% del mismo en 2007. Teóricamente, las proyecciones del gobierno determinaban que la inversión motor de la economía productiva, sería la privada, pero la realidad es que en 2006 esta no superó ni el 6.6% del PIB y en 2007 tampoco. A todo esto, el gobierno reemplazó la privada con la pública para tratar de cumplir con lo estimado, sin juicio alguno sobre su calidad.

Siguiendo en la misma lógica, lo único que en realidad se cumplió de dicho plan, es la mal llamada nacionalización que a YPFB le permite realizar inversiones, que en palabras de Valverde, al discutir el tema con su audiencia la pasada noche del 7 de enero, son vergonzosas porque no se las realiza con un criterio de eficiencia y eficacia.

No cabe duda en que la inversión privada fue enana, porque el clima creado por la Asamblea Constituyente y el Tribunal Constitucional no ha sido el mejor para las inversiones. Los mil millones que Petrobras compromete invertir este año, son un respiro muy profundo para el gobierno, pero tampoco vayamos a decir que es porque lo merecemos y porque el gobierno gestionó el acuerdo, si recién se reunirán Fernández de Kirchner y Da Silva con Evo.

No es que el Ministro mienta, pero sí sobredimensiona los resultados de una pobre gestión que presenta situaciones que no son posibles de argumentar a favor, como tener superávit con una elevada y preocupante deuda interna; generar empleo que en realidad es burocrático y no productivo; y realizar un fuerte gasto corriente inflacionario sin capacidad de ahorro interno.

Es verdad que un crecimiento como el que hoy cuestionamos, hubiese sido digno de reconocimiento y signo de estabilidad y prosperidad en cualquier otra época, pero para un economista resulta molesto tener que asentir ante la idea de que el país más pobre del vecindario, sea el que menos aproveche de la coyuntura externa que ya empieza a desaparecer.

Medite usted sobre el tema, utilice la aritmética y esté pendiente sobre los resultados del encuentro Gobierno-Prefecturas, para ver si realmente tendremos un ritmo de crecimiento del 7.6% para el 2011 como proyecta el gobierno. Por lo demás, así como las cifras del Ministro de Planificación, son solo palabras al viento.

http://lostiempos.com/noticias/10-01-08/10_01_08_pv2.php